Van por proyectos de infraestructura
SE DICEN LISTOS
La que se frota las manos por el Programa Nacional de Infraestructura y por la reforma energética es la empresa española Ayesa, fundada por José Luis Manzanares y dirigida en México por Nicolás Morris. Se especializa en la consultoría y al diseño estructural de proyectos de infraestructura e ingeniería. Sus clientes son grandes consorcios constructores como la también española OHL, que aquí lleva Sergio Hidalgo Monroy, e ICA, de Alonso Quintana Kawage, por mencionar a las más importantes. La firma, que está cumpliendo 10 años en México, se ha manejado con bajo perfil. A nivel mundial, factura al año cerca de 300 millones de dólares. México es considerado como el segundo mercado en importancia, pues factura 100 millones de dólares, es decir, una tercera parte del total.
Dentro de la empresa, se están frotando las manos pues se vería muy beneficiada de concretarse la reforma energética, pues una de sus especialidades es precisamente el sector energético y petrolero.
También esperaría participar en proyectos nuevos de infraestructura con el Plan Nacional de Infraestructura en el 2014. Dentro de sus proyectos en México, destacan el diseño de la Línea 12 del Metro de la ciudad de México, así como la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales en Atlacomulco y la Autopista Nuevo Necaxa.
AVIACIÓN DE PRIMER MUNDO
Uno de los grandes proyectos que modernizará la aviación civil mexicana es el nuevo Centro de Capacitación de la Aviación Civil, que comenzará a operar en el país el año próximo.
Tal ha sido la expectativa en este proyecto, que han decido ponerle el nombre de Roberto Kobeh.
Roberto Kobeh González es mexicano nacido en Chiapas, y se le reconoce como una gran autoridad en la materia; actualmente, es presidente del Consejo de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), organismo de las Naciones Unidas, y dejará su encargo al frente de este organismo en noviembre próximo.
El subsecretario de Transporte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Carlos Almada, comentó que se trata de un “especial reconocimiento a un compatriota que ha dedicado su vida a la aviación mexicana y a la aviación civil internacional”.
QUIEREN SU CARRETERA
Medio centenar de constructoras participan en la licitación de la carretera T 348 de Nayarit. En este proceso, que implica una derrama de aproximadamente 300 millones de pesos, hay grandes empresas mexicanas y, por supuesto, un trabuco de grupos españoles, entre ellas Aldesa, Sacyr, COMSA y Gia. A la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, de Gerardo Ruiz Mateos, le toca conducir este proceso y llevarlo a buen puerto.
SE PONEN AL BRINCO LOS BANCOS
Hablando de la reforma fiscal, resulta que el dicho de “calladitos se ven más bonitos” ya no les gustó a los banqueros. Y es que ése fue su papel hasta que, en medio de los debates de la reforma, Alberto Gómez Alcalá, presidente ejecutivo de la Asociación de Bancos de México, hizo hincapié sobre una de las deficiencias del proyecto del gobierno: la economía informal y cómo no se hace gran cosa para meterlos al redil.
Curioso su punto de vista: dice que el gobierno quiere incrementar la capacidad de crédito pero la única manera de hacerlo es por medio de la economía informal que se autoexcluye del sistema financiero. La nota es que, hasta ahora, sólo le había echado porras a la reforma financiera porque -según- mejoraba su negocio, les permitiría dar más crédito, más barato y habría incentivos para la competencia entre los bancos y sus nuevos productos; sin embargo, ya empezó a criticar porque se encarecerá la operación de los bancos con 209 nuevas normas.
“¿Sobrerregulación? No sé, pero son demasiadas nuevas normas”, dijo el directivo.
LA ESCUELITA
El director de Pemex, Emilio Lozoya, inauguró su Universidad Corporativa, que se enfocará a la recolección y reeducación del talento disponible en las carreras afines a la industria petrolera. Los buscarán y encontrarán donde sea, porque prevén un déficit muy importante en sus recursos humanos. Se requieren desarrollar habilidades y conocimientos petroleros específicos y se entiende que son más una estrategia para el desarrollo integral de capital humano e incrementar la productividad laboral en Pemex. Según Víctor Díaz Solís, director de Administración y cabeza del proyecto, la Universidad Pemex contará de inició con las escuelas Técnica, de Procesos y de Negocios, y estará dirigida a personal sindicalizado y de confianza.
Fuente: El Economista
